Tras unos días marcados por los excesos en la comida, y con la proximidad del fin de año, se celebran también las tradicionales carreras de San Silvestre, la cita popular del calendario con la que se queman las últimas calorías antes de la cena de Nochevieja. De hecho, quienes participan en la misma pierden entre 489 kcal. y 634 kcal., según la estimación calórica calculada por un equipo científico del gabinete Sprim a partir de las Tablas de composición de alimentos, realizada por las nutricionistas Olga Moreiras, Ángeles Carbajal, Luisa Cabrera y Carmen Cuadrado.
La San Silvestre no es una carrera urbana al uso. Hace tiempo que se ha convertido en una parte más de las celebraciones de fin de año. La cita reúne a miles de personas, profesionales o amateurs, en los principales núcleos urbanos del país para correr en familia o con amigos. Elegir una buena alimentación, además de salir a correr los días previos, es primordial, tanto para su preparación como para una adecuada recuperación tras el esfuerzo compatible con los excesos de las fechas navideñas.
Dieta con «efectos saludables» y sin grasa
Menos comentada en los círculos de deportistas que otros alimentos como la pasta, la carne de conejo es perfecta para incluir en la dieta de quienes vayan a correr la San Silvestre por su bajo contenido en grasa y proteínas de alto valor biológico. Como buen alimento completo, junto a macronutrientes, aporta micronutrientes claves como el hierro, selenio y vitaminas B3, B6, B12 y ácido fólico, detalla el estudio.
Además de por su valor nutricional, la carne de conejo es muy sabrosa, da mucho juego en la cocina permitiendo una gran variedad de combinaciones y se puede adquirir a un precio muy económico.